Blue Moon
Corría el año 1934 cuando el exitoso dúo de compositores formado por Richard Charles Rodgers (1902-1979) y Lorenz Hart (1895-1943), que formaron equipo durante 25 años, componía una de las canciones más conocidas y versionadas de la historia de la música: Blue Moon.
Autores de composiciones de gran éxito como “The lady is a tramp”,»My funny Valentine” y “Bewitched, bothered and bewildered”, trabajan en la composición de las canciones para la comedia musical “Hollywood party (Una fiesta en Hollywood)”, protagonizada por un elenco de las mayores figuras de la época de los estudios Metro Golden Mayer y piensan en incluir una escena en la que Jean Harlow se muestra como una niña inocente diciendo –más concretamente cantando- sus oraciones. No tenían muy claro cómo encajar la secuencia en la película, pero el propósito era expresar la abrumadora ambición de Harlow por convertirse en una estrella de cine. La canción no se llegó a grabar y la compañía registró la canción con el título “Prayer (Oh Lord, make me a movie star)” el 14 de junio de 1933 por los derechos de autor como un trabajo no publicado.
Lorenz Hart escribió una nueva letra para la melodía con el objetivo de incluirla en la película de 1934 “Manhattan melodrama (El enemigo público número 1)” con el título “It’s just that kind of play”, fue eliminada de la película antes de su lanzamiento y registró los derechos de autor como un trabajo no publicado el 30 de marzo de 1934.
El estudio les pide un número de club nocturno para la película y Rodgers, que seguía apostando por la melodía, le pide a Hart una nueva letra: “The bad in every man” que fue interpretada por Shirley Ross. La canción pasó desapercibida.
Después de que la película fuera estrenada por los estudios MGM, Jack Robbins –el jefe de publicaciones de la compañía- decidió que la melodía era adecuada para su lanzamiento comercial, pero necesitaba una letra más romática y un título más pegadizo. Hart se negó en un principio a reescribir la letra pero le convencieron y el resultado final fue “Blue Moon”.
Robbins envía la canción a un programa de radio, Hollywood Hotel, que la utiliza como cabecera. El 15 de enero de 1935, Connee Boswell la grabó para Brunswick Records. Posteriormente apareció en al menos siete películas más de la productora, incluyendo “At the circus (Una tarde en el circo)” de los Hermanos Marx, “Meet me in Las Vegas (¡Viva Las Vegas!)”, “Grease (Brillantina)” y “An american werewolf in London (Un hombre lobo americano en Londres)”.
Hay una versión de la canción con un inicio alternativo que han versionado a dúo Eric Clapton y Rod Stewart.
Y hablando de versiones de la canción, multitud de cantantes la han hecho suya. La lista es interminable tanto en estudio como en concierto pero por citar algunos: la gran Billie Hollyday, el reivindicativo Bob Dylan, Django Reinhardt, la incomparable Ella Fitzgerald, el rey del rock Elvis Presley, Frank “The voice” Sinatra, Glenn Miller y su orquesta, Michael Bublé, Sam Cooke… dan una idea del magnetismo que provoca, ya que se ha adaptado a los más variados estilos.
Pero si tengo que quedarme con una, reconozco que mi preferida es la suave y delicada interpretación de The Mavericks incluida en la banda sonora de la película “Apollo 13” (1995), dirigida por Ron Howard y protagonizada por un elenco de lujo con Tom Hanks a la cabeza y magistralmente secundado por Kevin Bacon, Bill Paxton, Ed Harris o Gary Sinise. Lamentablemente desaprovechada en el film, el tono seductor y cadencioso de la melancólica canción habría encajado perfectamente con las secuencias espaciales dibujando un cuadro onírico de la eternidad e inmensidad que siempre evoca el inabarcable vacío del universo.
Es tal la atracción que provoca este tema que ni siquiera el deporte ha podido permanecer indiferente a sus encantos y es que los seguidores del Manchester City la han adoptado como su himno no oficial.
Todo empezó en los 80, cuando los hinchas decidieron sustituir los himnos de sus equipos por canciones famosas. Los primeros que la entonaron fueron los fans del Crewe Alexandra, un club inglés con una larga tradición de más de 130 años que vivió una época especialmente oscura a mediados de los 90, lo cual les inspiró esta asociación aunque con ciertas variaciones con respecto a la original.
Tiempo después los “citizens”, los seguidores del Manchester City, siguieron el mismo impulso que los del Crewe y comenzaron a cantarla tras el partido inaugural de la temporada 1989-90 contra el Liverpool en el mítico Anfield.
Ha sido tal la identificación del equipo con la composición que incluso William John Paul “Liam” Gallagher –exvocalista de Oasis y actual líder de Beady Eye-, fan confeso del club, ha grabado su propia versión –bastante rockera- como demostración de su amor por el club.
Os invito a ver alguno de los innumerables vídeos que circulan por la red, tanto de las versiones de los distintos artistas como de los aficionados del City cantando a capela en el estadio.
Letra de la canción
Blue moon
You saw me standing alone
Without a dream in my heart
Without a love of my own
Blue moon
You knew just what I was there for
You heard me saying a prayer for
Someone I really could care for.
And then there suddenly appeared before me
The only one my arms will hold
I heard somebody whisper please adore
And when I looked, the moon had turned to gold
Blue moon
Now I’m no longer alone
Without a dream in my heart
Without a love of my own
Luna triste
Tú me viste sola
Sin un sueño en mi corazón
Sin un amor en mí
Luna triste
Tú sabías por qué estaba ahí
Tú me escuchaste rezar
Por alguien que pudiera cuidarme
Y entonces apareció ante mí
El único que mis brazos abrazaron
He oído que alguien susurra: “por favor, adórame”
Y cuando miré, la luna se había vuelto dorada
Luna triste
Ahora ya no estoy sola
Sin un sueño en mi corazón
Sin un amor en mí
Luna triste
Fuentes: Wikipedia, http://espanol.mcfc.com/News/Club-news/2013/August/Blue-Moon
Por fin música en bloginterference.com!