Mundial de Brasil – 4ª jornada
Tras la resaca de poder disfrutar de 4 partidos del día anterior, la cuarta jornada del Mundial de Brasil la abrían Suiza y Ecuador.
El partido comenzó con dominio europeo y con los americanos tratando de salir a la contra, con sus rapidísimos volantes. En el primer cuarto de hora apenas hubo nada destacado, salvo un par de disparos suizos sin demasiado peligro.
Con los equipos aún conociéndose, en el minuto veinte la zaga suiza concedió una falta en un lateral del área, Ecuador colgó el esférico al área chica y en el peor instante los suizos decidieron tomarse vacaciones y pasar de saltar por el esférico, lo que aprovechó Valencia para de cabeza lograr el primer gol de la tarde.
El tanto espoleó a los suizos, que se lanzaron al ataque pero con excesiva precipitación, tratando de colgar balones que el meta Domínguez despejaba en alguna ocasión con problemas, sin dar demasiada seguridad. En el minuto treinta un saque de esquina, a punto estuvo de escapársele al meta ecuatoriano, pero al final solventaron el problema. Posteriormente en el 33 Inler se sacaba un chut desde lejos y Domínguez en gran intervención desviaba la bola a corner.
Eran los mejores minutos helvéticos, que encerraron por completo a los ecuatorianos, con disparos lejanos y centros a la meta rival, en donde los centrales americanos y el arquero sufrían para desbaratarlos y pedían a gritos el descanso.
Sin embargo en los últimos cinco minutos Ecuador se espabiló un poco y creó un par de ocasiones de peligro, en una de ellas se pidió penalti sobre Caicedo, pero el marcador ya no se movería más en la primer mitad.
El segundo tiempo comenzó con un lanzamiento de Lichsteiner que salió rozando el palo, luego de pegar en un defensa. El saque de esquina fue calcado al del gol ecuatoriano y Mehmedi, aprovechó la devolución del regalo de la zaga americana para de cabeza poner las tablas.
Ecuador quedó muy tocado con el gol, y tan solo un minuto después Inler con un chut lejano apunto estuvo de poner el segundo. En los siguientes minutos, el partido se convirtió en un correcalles con llegadas a las dos porterías, pero sin puntería en ambos bandos.
A partir del minuto 60, Ecuador volvió a hacerse con el mando y Valencia primero y Caicedo después estuvieron muy cerca del gol, ante unos helvéticos que se tomaban un respiro, Montero encontró en banda izquierda una autopista ante Lichsteiner y en una de esas, en el 65 se marchaba del lateral y encaraba a un Benaglio que salvaba el mano a mano bien colocado. Los suizos respondieron inmediatamente y Drmic marcaba un gol que le era anulado por un inexistente fuera de juego en otro error arbitral en el Mundial.
El partido estaba precioso, completamente roto con llegadas constantes y Shaquiri tenía otra oportunidad en un disparo que se marchaba por poco.
Los últimos diez minutos fueron de Suiza, ante unos andinos que se echaron atrás en busca de una contra, con los recién ingresados Rojas y Arroyo, dos auténticas balas, y en una de esas contras, Djorou tuvo que hacer falta sobre Rojas y el disparo de Arroyo, lo desviaba la barrera y Benaglio reaccionaba de manera increíble salvando los muebles para Suiza.
Hasta el final, con los dos equipos muertos, la ruleta rusa se siguió sucediendo, con las defensas rebasadas al no recibir apoyo del medio campo y cuando ya se adivinaba el empate, en la última jugada del encuentro, Behrami salvaba en su propia área un balón que Arroyo ya veía dentro y en la posterior contra, Rodríguez centraba un balón raso y Seferovic, ponía el 2 a 1, de manera definitiva y que dejaba hundidos a los ecuatorianos.
Por lo visto, no se puede decir que sea injusto, pero el empate era merecido para Ecuador, que ahora queda muy tocada en cuanto a sus aspiraciones de clasificación.
El segundo encuentro enfrentaba a Francia y Honduras, dos equipos muy físicos que no se arrugan a la hora de ir al choque. A priori los bleus eran favoritos, pero los catrachos con sus dos panzers delanteros se conjuraban a pillar algún balón en largo.
El primer aviso llegó en el minuto quince, tras una falta lateral, en la que Matuidi recogió un rechace y Valladares rozó lo justo para que el balón se estrellara en el larguero.
A raiz de esa ocasión, Honduras todavía se metió más atras y los galos acrecentaron el asedio, lo que provocó que en el 22 de nuevo Francia estrellara otro balón en el larguero catracho, tras un gran cabezazo de Griezmann. Tan solo un minuto después de nuevo Francia disparaba demasiado alto otra buena ocasión. Parecía que el gol era cuestión de tiempo y los hondureños completamente sobrepasados, comenzaron a repartir estopa, lo que enfureció a los galos y a la media hora, Pogba y Palacios se pudieron ir a la calle, tras una tángana entre los dos, que el colegiado resolvió con amarilla para cada uno.
Con los hondureños buscando parar el encuentro constantemente, a Francia le costó un poco volver a dominar el partido, pero finalmente volvieron a crear peligro y en el minuto 42 Palacios cometía penalti sobre Pogba y como consecuencia veía la segunda amarilla y dejaba a Honduras con diez.
Benzema transformaba el penal y a partir de ahí, a los catrachos solo les quedaba rezar para no llevarse una goleada, mientras que por parte gala, no bajaron el pistón y continuaron generando peligro hasta el descanso, sin fortuna a la hora de finalizar.
La segunda mitad no pudo empezar peor para Honduras. Al minuto dos Benzema remataba de primeras un gran centro, el balón da en el palo y se pasea por delante de la línea, hasta que el meta Valladares, la pifia y al tratar de parar la bola, la mete para dentro por muy poquito. Por primera vez se pudo utilizar la nueva tecnología para ver si era gol o no, y las imágenes mostraron que el balón había entrado por poco.
El partido no tenía historia, y los galos se dedicaron a entrenarse con público, pero sin bajar en exceso el pistón al estar picados por la excesiva dureza catracha. Así Valladares en el 55 detenía un balón a bocajarro y un minuto después Valbuena tiraba un tiro cerca de la escuadra.
Más tarde Matuidi en el 63 estrellaba un balón en el exterior de la red y posteriormente en el 73 Benzema lograba el tercero, tras recoger un rechace en el área y fusilar a Valladares.
De aquí hasta el final más de los mismo, Francia atacando, aunque cada vez con menor intensidad y Honduras repartiendo, pero el marcador ya no se movería más.
El último partido de la noche nos traía a uno de los candidatos al título, Argentina que se enfrentaba a la debutante e inexperta Bosnia.
Y el encuentro no podía empezar mejor para la albiceleste, pues en el minuto 3 Kolasinac se metía un gol en propia meta luego de una falta colgada al área bosnia.
Con ese gol, los bosnios que habían salido con un planteamiento ultra defensivo, buscando pillar a la contra a Argentina, tuvieron que adelantar más las líneas y arriesgar más y por ahí Argentina comenzó a dar muestras de flaqueza en defensa, con Bosnia combinando, y creando en el minuto doce una clara ocasión que Romero despejó jugándose el físico.
De esa manera fue transcurriendo la primera media hora de encuentro, con ambos equipos que se replegaban atrás cuando no tenían la posesión, y que combinaban con paciencia hasta llegar arriba cuando gozaban de la posesión de balón. Pero eso lo que provocaba es que las ocasiones no aparecieran, tan solo un disparo de Mascherano y otro de Dzeko, fueron todo el caudal ofensivo en esos primeros treinta y cinco minutos.
Por fin en el minuto cuarenta se pudo ver otra clara ocasión, en este caso Bosnia, a través de un córner remató de cabeza Lulic y Romero atentísimo salvó con una gran intervención el empate.
Así terminaba un aburrido primer tiempo, en el que los americanos se salvaron gracias a un gol de churro, pero dejaron muy claro que salvo las conducciones de Messi y Di María, Argentina no tenía creación de juego y era demasiado previsible.
Parece que la primera parte no gustó nada a Sabella a pesar del resultado, porque en el descanso introdujo a Gago e Higuaín, quitando así la defensa de cinco y pasando a un 4-3-3 más ofensivo.
Pero la apuesta no le salió muy bien al comienzo, pues Bosnia comenzó a llegar con más facilidad, mientras que Argentina perdía rápidamente el balón y solo Agüero tuvo un disparo en los primeros diez minutos.
Hasta el minuto 60 no llegó la primera ocasión clara albi celeste, en un nuevo disparo del Kun, que Begovic detuvo muy bien. En esos momentos, algunos jugadores bosnios parecían estar cansados y el equipo lo comenzó a notar.
Y por ahí vino el principio del fin bosnio, el seleccionador bosnio no se atrevió a realizar cambios para refrescar el medio campo y los argentinos comenzaron a presionar más, y fruto de ello, Messi en una de sus características cabalgadas, se plantaba al borde del área y como siempre, de disparo raso hacía su primer gol del Mundial.
Con el tanto Bosnia se vino abajo, ahora si que el entrenador balcánico arriesgó más y metió a Ibisevic para apoyar a Dzeko, pero ya era tarde.
Argentina se empezó a gustar y a tocar, dejando correr el tiempo y creando alguna jugada de peligro aislada, ante unos bosnios rendidos o eso parecía, porque en el 84 Ibisevic en una acción esporádica se plantaba ante Romero y de tiro cruzado lo batía poniéndole salsa a los últimos minutos. El excesivo conservadurismo argentino les podía costar caro, pues algunos jugadores argentinos también estaban agotados y el equipo se partía en dos, con jugadores que ya no bajaban.
Pero el partido en los últimos cinco minutos con los jugadores rotos, ya no tuvo cambios y Argentina sumó sus tres primeros puntos, con más problemas de los esperados.